Me gustan las playas de arena, he crecido en una de ellas, no hay cosa más agradable que el sentir como la arena cede ante tu peso y se va amoldando a cada paso, pero si hay que buscarle un punto negativo, es cuando la arena se junta con su amiguito el viento, chiquillos desinquietos carajo¡ mira que duele eh?
Por eso, y ante ese problema mejor prevenir que curar y es mejor parapetarse estos abrigos y poder disfrutar así de la playa sin más preocupación que no te quemes por culpa del sol, aunque el día de la foto el sol jugaba al escondite ;)
Espero les guste la foto y como no, este mágico lugar es Caleta de Famara, sean felices¡¡
Gabo Monzón
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