Y así, como quien no quiere la cosa, he llegado a las 100 fotografías, ya son muchos meses en los que ando con este reto, ha habido días duros en los que la cámara me pesaba más que mi propio cuerpo, pero gracias a las redes sociales me han salido muchos seguidores, personas cercanas y algunas incluso desconocidas que hacen que cada día y cada foto que subo al blog merezca la pena, y es por esas personas en esos momentos por lo que sigo adelante, bocado a bocado, poquito a poco, persiguiendo una meta, que se traduce en constancia y aprendizaje diario.
Gracias a todos,¡ de corazón
Hoy, a la vez que llego a las tres cifras, también un año toca a su fin, un año agridulce, con muchos cambios, con muchos caminos que se han cerrado y otras veredas que han ido apareciendo en momentos en los que las letras de "camino cortado" era todo lo que veía, llevándome a lugares desconocidos y conociendo a personas que han venido para quedarse. Un año raro, por así decirlo.
Es por ello que hoy quería poner una foto especial, pero no he podido captar aquello que anhelaba, y me he decidido por esta instantánea, que a modo de metáfora, representa para mí este día, un choque brusco, donde, al igual que ocurre con las fuertes marejadas, solo permanece inmutable aquello que está fuertemente arraigado y todo lo demás, simplemente se va, arrastrado por la marea, como si nunca hubiese existido, y esa es una de mis premisas para el año que viene, dejar lo malo y negativo atrás, agarrar con fuerza lo que me mantiene centrado, convertir esas veredas en caminos y seguir retándome cada día, nuevos proyectos en mente y continuar con los ya establecidos, como este blog y el intentar arrancarles una sonrisa a toda mi gente cada día por la mañana.
Les deseo a todos lo mejor, ojalá se cumplan sus más anhelados deseos en este año que llega en unas horitas, que crezcan como personas y lo más importante, que vean lo positivo allá donde miren, sin trivializar, pero de todo siempre sale algo bueno si no es para ti, lo será para otra persona.
Sean felices y hagan felices a quien se cruce en su camino, creo que la vida es muy corta para andar con las penas colgando de los tobillos.
FELIZ AÑO 2014
Se os quiere
Un fuerte abrazo
Me despido hasta mañana, seguramente resacado y con la cuesta de enero arrátrandome a la cama, pero mi primera foto capicúa no va ha faltar ;o) lo garantizo¡
Gabo Monzón
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