Salir a tomar el aire al atardecer, sintiendo en la piel como poco a poco baja la temperatura, como el cielo va tomando un cáliz rojizo para ir pasando gradualmente al azul oscuro,y observar como todo a tu alrededor, cambia a un tono más pálido, es como si con un regulador la luz del ambiente descendiera, te relajas y por un momento te sientes libre, sin tanto estrés y si tienes la suerte de estar en un lugar emblemático, como yo lo pude observar al tomar este instante en el barrio de San Francisco en Telde, puedes despedirte del día sabiendo que ha valido la pena.
Espero que todos tengan un buen feliz fin de semana y como no
Nos vemos mañana
Sean felices
Gabo Monzón
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